¡Hola a todos! Es un placer para mí decirles que he vuelto. He vuelto contenta con la experiencia y con cierto pesar de saber que ha terminado. Y he vuelto sabiendo que he aprendido un par de cosas que me servirán en el futuro. 

El día que me fui no tuve la oportunidad de contarles demasiado de este asunto y ahora es el momento de decirles. Les expliqué que en el lugar donde trabajo hacen unos Juegos Deportivos y Culturales. Estos juegos se realizan cada año y se dividen en dos etapas: Regional y Nacional. En la primera etapa participan los estados cercanos a tu región, en mi caso, al ser del sureste mexicano participan Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán. Los que resulten ganadores en sus respectivas regionales pasan a la etapa nacional que puede ser en cualquier estado de la República pero, aunque parezca sencillo, ganar no es fácil. Imagínense ¿Vacaciones pagadas durante una semana y sin ir a trabajar? Es un excelente premio y es por eso que la gente se esfuerza en ir y participar. Yo soy nueva así que todo este asunto es tan nuevo para mí como para ustedes. 

Ahora, como podrán suponer, mi viaje era para participar en la etapa regional representando a mi estado en las distintas disciplinas deportivas (Atletismo, Voleibol, Fútbol, Basquetbol, Softbol, etc) o culturales (Teatro, Declamación, Baile, Canto, Oratoria, etc) y lo primero que hacen es decirnos qué días son nuestros respectivos eventos e ir a la inauguración. Así te pones de acuerdo con los que se quedaron en tu mismo hotel para ver a qué eventos quieres asistir. En el caso de los culturales son el último día con la idea de cerrar con broche de oro todos los juegos.

Para no hacer esta entrada enormemente larga les diré que el primer día me estresé bastante al saber que sería la primera en cantar -sí, yo y mi mala suerte, sacó el papel que tiene estampado el número uno- y bueno, ya sé imaginan, era la única nueva, todos ya se conocen y yo sin tener idea de qué íbamos a hacer pues normalmente va otra de mi estado en canto pero este año, por motivos personales, decidió no ir así que estaba sola cuando la gran mayoría iba acompañado. Tuve que hablar a mi papá para que me terapeara y verle el lado positivo a las cosas.

El día del evento me levanté ansiosa pues teníamos que ensayar antes en el teatro para checar micrófonos, pistas, conocer el escenario, etc y era mi primer encuentro con los demás participantes. Me da gusto decir que es gente que sabe de eso y que, quizá no seamos súper profesionales, pero ahí le vamos.

Posteriormente, pasaron las horas y llegó el momento del show. Cantamos dos canciones -en dos rondas distintas- y créanme cuando les digo que subirse, controlar los nervios y cantar no es fácil. De las dos canciones que canté considero que la primera es como un borrón en mi mente -no me pregunten qué hice- y la segunda es de la que estaba más segura -ya había pasado el primer susto y estaba más tranquila- así que tocaba esperar resultados.

La espera fue larga -casi media hora- quedando ganadores uno de los dos que iban por Chiapas, la muchacha de Quintana Roo y otra de Tabasco. Y, aunque no gané, me siento contenta con los resultados y con mi desempeño porque sé que los que me ganaron son los que han ganado años anteriores y es gente que lleva tiempo haciendo esto. Errores hubo pero como dije al principio, ahora sé en qué debo mejorar y a lo que me atengo, que el escenario impone y nadie está exento -dos de mis compañeros del concurso olvidaron la letra- pero el punto es salir adelante y prepararse para la próxima.

También estoy contenta porque el próximo año irá mi compañera de Campeche -me enorgullece decir que ella es la campeona nacional del año pasado así que no voy con cualquiera- y que este fue el ensayo y el error. Mis compañeros de la Delegación me felicitaron y animaron a seguir -nunca me habían escuchado- e incluso de otros estados se acercaron a decirme cosas bonitas. Se escucha por ahí que el próximo año seremos estado anfitrión así que es doble responsabilidad -ya vi a todos mis tíos ahí- y sólo queda prepararse mejor.

¡NOS VEMOS, CAMPECHE 2016!